Con una asistencia de golfistas de todo el mundo, los mejores resultados generales en mucho tiempo y un maravilloso clima que favoreció todos los scores individuales, concluyó la cuarta y última ronda del PGA TOUR Latinoamérica, la máxima justa del golf en la América hispana.
144 golfistas profesionales se dieron cita en el complejo turístico Estrella del Mar, un bello campo ubicado en la playa del Océano Pacífico de Mazatlán y diseñado por Robert Trent Jones Jr., el cual recientemente tuvo una gran remodelación, principalmente en la parte de los greens.
Las perfectas condiciones climáticas prevalecientes y la alta calidad de los golfistas participantes, marcaron desde el inicio una feroz carrera por los scores más bajos, tanto que el corte para pasar a la tercera ronda se definió en un increíble menos 7. La cuarta y última ronda comenzó con un -19 de tres jugadores lidereando la justa, seguidos por 4 jugadores a un golpe de distancia.
Solamente los 11 birdies que tiró el brasileño Alexandre Rocha pudieron marcar la diferencia para conquistar el campeonato con un -29 en la suma de las cuatro tarjetas, seguido del mexicano Álvaro Ortiz Becerra con tres golpes de distancia, y por el también representante de México Raúl Pereda a un golpe más.
Muchos de los profesionales participantes de este torneo de la PGA Tour expresaron que no solamente el excelente clima que siempre tiene Mazatlán ayudó a los excelentes scores, sino también las excelentes condiciones de los campos de golf.
En los últimos dos años, la Perla del Pacífico como se conoce, se ha caracterizado por su auge económico y turístico, con un gran número de construcciones e inversiones tanto del sector público como privado, que incluye hoteles de marcas internacionales, condominios vacacionales, centros comerciales, restaurantes, el Malecón de Mazatlán, el Paseo Olas Altas, el Centro Histórico, el Parque Central, la Playa Norte, el Faro, el Parque de las Ciudades Hermanas, la avenida principal Rafael Buelna, la avenida principal de la zona hotelera Camarón Sábalo y el libramiento directo de la Zona Dorada al Aeropuerto Internacional, entre otras. Sus 20 kilómetros de doradas y arenosas playas, su gastronomía y la hospitalidad de sus habitantes siguen siendo los principales atractivos que mantienen el flujo de visitantes todo el año.